En el año 2001, fundé mi propio taller de artesanía en piel tras un largo proceso de prueba, en el cual experimenté con una manufactura más tradicional con piel de ternera y potro, diseñando bolsos exclusivos, diferentes y siempre con una nota de color.
En 2003 creé un estilo personal, comencé a emplear otro tipo de piel: badana, aprovechando sus cualidades para poder pintar sobre ella definiendo los estampados y evolucionando hacia una artesanía más contemporánea, fresca y colorista.
Desde entonces, en cada una de mis colecciones, diseño y elaboro bolsos y complementos de piel pintados a mano alzada. Comercializamos nuestros productos en ferias de artesanía, tiendas y por Internet.